Espiritualidad

El Papa San Juan Pablo II expresó su deseo de que la Iglesia viva la espiritualidad de Pentecostés: “Deseo que la espiritualidad de Pentecostés se difunda en la Iglesia, como renovado impulso de oración, de santidad, de comunión y de anuncio”[1] del Evangelio. En esta afirmación se comprende que toda la Iglesia está llamada a vivir una relación cercana con el Espíritu Santo, de manera que viva un Pentecostés permanente que aliente su misión.

Explicación del Padre Diego Jaramillo


[1] San Juan Pablo II. (2004). Homilía Primeras Vísperas de la Solemnidad de Pentecostés, No. 3.